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ver nota en la Voz del Interior: http://www.lavoz.com.ar/ciudadanos/argentina-y-la-enciclica-papal
ARGENTINA EN EL CONTEXTO DE LA ENCICLICA DEL SANTO PADRE
Por Romina Picolotti
“…la existencia humana se basa en tres relaciones fundamentales estrechamente conectadas: la relación con Dios, con el prójimo y con la tierra. Esta ruptura es el pecado.” Encíclica “Alabado Seas”, Papa Francisco
Una vez más el Papa Francisco sorprende al mundo. Cuando las naciones se debaten sobre el camino a tomar frente a la crisis climática, Francisco avanza con un mensaje firme y claro. La crisis climática es obra del hombre y es preciso avanzar de manera urgente con acciones concretas para evitar daños irreversibles. Su mensaje nos incluye a todos, ciudadanos de pie, creyentes, no creyentes, gobernantes, empresarios. Mientras avanzaba en la lectura de la doctrina del Santo Padre me preguntaba qué significa en el contexto de nuestra querida patria. Como sería una Argentina que se aviniera a vivir en armonía con la encíclica del Santo Padre?. Reflexionar sobre ello no es una reacción meramente chauvinista, todo lo contrario, obedece a la inmensidad de nuestra patria y la creencia de nuestra gente. Es que Argentina es uno de los países de mayor recursos naturales del mundo y donde el 95% de su población se encuentra bautizada por la iglesia católica.
En su Encíclica Francisco destaca la importancia de cuidar el agua, los bosques, los glaciares, hacernos responsables de nuestros residuos y promover la agricultura respetuosa de la tierra. Vivir de acuerdo a la encíclica implicaría por ejemplo realizar un gestión integral responsable de nuestros recursos hídricos. proteger nuestros glaciares aplicando la ley de glaciares, sanear definitivamente el Riachuelo y avanzar firmemente en la gestión de la Cuenca endorreica más grande del país, la Cuenca Salí-Dulce. El Santo Padre reflexiona “… países poseedores de una legislación clara para la protección de bosques siguen siendo testigos mudos de la frecuente violación de estas leyes.”. Vivir según la encíclica del Santo Padre en Argentina implicaría, aplicar la ley de protección de bosques nativos, sancionar la tala indiscriminada y el abuso de agroquímicos, promover la agricultura sustentable, evitar la desertificación de nuestros suelos, incentivar las energías renovables y rechazar la falsa utopía del fracking. A nivel provincial significaría sanear nuestros lagos contaminados y proteger nuestros bosques. En nuestra ciudad implicaría reducir la contaminación del aire, organizar el caos de nuestro transporte y nuestro tránsito, planificar el crecimiento sustentable de nuestra ciudad, hacerla accesible para todos y avanzar en una gestión integral de nuestros residuos sólidos urbanos.
Francisco nos alienta a preguntarnos“¿Para qué pasamos por este mundo? ¿para qué vinimos a esta vida? ¿para qué trabajamos y luchamos? ¿para qué nos necesita esta tierra? … Somos nosotros los primeros interesados en dejar un planeta habitable para la humanidad que nos sucederá. Es un drama para nosotros mismos, porque esto pone en crisis el sentido del propio paso por esta tierra.” Vivir en nuestra patria honrando las palabras del Santo Padre implica levantarnos todas las mañanas y realizar acciones que contribuyan a armonizarnos con la Tierra. “No habrá́ una nueva relación con la naturaleza sin un nuevo ser humano.” En cada uno de nosotros existe ese ser nuevo.